Los desarrollos en los diferentes materiales aleados han permitido grandes avances de la industria y la evolución del estilo de vida, evidenciable desde herramientas cotidianas hasta los instrumentos más especializados.
Es posible diferenciar entre varios procesos que se llevan a cabo en el marco de la metalurgia. La primera tarea consiste en obtener el metal a partir del mineral, una acción que puede lograrse a través de operaciones químicas (como la oxidación, la lixiviación y la hidrólisis) o físicas (molienda, decantado, centrifugado, destilación, etc.). La segunda, toma dicho material para ser alearlo según las especificaciones necesarias. La última se encuentra encargada de la comercializar el producto final, de allí se pasará a la cadena de distribución a manos de intermediarios o consumidores finales que no requieren realizar el control de calidad químico directamente sobre los materiales. Cabe aclarar que una empresa puede hacer parte de más de un grupo.